Las tortugas terrestres son reptiles excepcionales, que pueden ser de diferentes tamaños y presentar características sencillamente sorprendentes.
La mayoría de ellas comparte el amor por el sol, y por lo general su comportamiento es muy tranquilo y paciente.
Aunque hay algunas especies más inquietas a las que les gusta caminar un poco más y así explorar el ambiente.
Por otro lado hay tortugas terrestres con un temperamento algo agresivo, pero sin embargo muchas de ellas pueden criarse en cautiverio.
Para enterarte de más información interesante sobre las maravillosas tortugas terrestre sigue leyendo este artículo que hemos preparado para ti.
Características de las tortugas marinas
Las tortugas terrestres cuentan con determinadas características que no solo las diferencian entre ellas mismas, sino que también las diferencian de las tortugas marinas.
Cada sub especie de tortuga terrestre varia en cuanto a colores, tamaño y peso, pero todas comparten ciertas características generales, como por ejemplo:
- Aunque no pueden vivir en el agua, a muchas les encanta refrescarse e hidratarse en porciones de agua llanas.
- Les gusta las temperaturas altas y tomar el sol
- La mayoría cuenta con un periodo de hibernación o por el contrario de estivación
- Muchas tortugas terrestres pueden ser criadas en casa como mascotas
- Sus mandíbulas y mordida son muy fuertes y filosas
- Pueden contraer todas sus extremidades y la cabeza para esconderse dentro de su caparazón, medida que utilizan cuando se sienten amenazadas
- Son muy longevas, según su especie pueden vivir hasta más de cien años.
Comportamiento
La mayoría de las tortugas terrestres son muy tranquilas, disfrutan de caminar pausadamente mientras reciben los rayos solares, lo cuales benefician el fortalecimiento de su caparazón.
Algunas tortugas terrestres son algo más activas, y dan largas caminatas, exploran y hacen excavaciones.
Otras pueden ser muy territoriales y de temperamento hostil, razón por la que pueden presentarse fuertes contiendas entre ellas.
Cuando están asustadas o se sienten amenazadas, introducen todas sus extremidades y cabeza dentro de su caparazón.
Las tortugas terrestres que viven en su hábitat natural tienen un periodo de hibernación en el cual se protegen de las inclemencias del clima.
Especies de tortugas terrestres
Existen varias especies de tortugas terrestres, entre las que podemos mencionar las siguientes:
- Galápagos
- Mora
- Rusa
- Sulcata
- Mediterránea
- Estrellada
Hábitat de las tortugas terrestres
La mayoría de las tortugas terrestres hacen vida en territorios secos, en los cuales la vegetación es árida y los veranos pueden ser intensos, otras son habitantes de zonas tropicales.
Aunque no pueden nadar ni vivir dentro del agua, ellas buscan pequeñas porciones acuáticas en las cuales puedan refrescarse, hidratarse y alimentarse.
En cautiverio es necesario imitar las condiciones climáticas adecuadas para que puedan mantenerse saludables y con vida.
Alimentación de las tortugas terrestres
La mayoría de las tortugas terrestres tienen una dieta muy diversa, y muchas de ellas necesitan ingerir grandes cantidades de comida debido a que pueden llegar muy grandes, como por ejemplo la tortuga gigante de Galápagos.
Estos reptiles mayormente son herbívoros y omnívoros, es decir, que pueden comer variedad de alimentos.
La dieta de las tortugas terrestres debe ser alta en fibras y calcio y baja en proteínas, ya que el exceso de estas últimas puede causarles graves problemas de salud.
Tanto en su entorno salvaje como si se están criando en cautiverio, el menú de las tortugas terrestres debe incluir hojas, lechuga, espinacas, brócoli, dientes de león, hierbas, pasto, alfalfa, ensaladas y porciones de frutas.
Amenazas de extinción de las tortugas terrestres
Las tortugas son una especie que se encuentra amenazada principalmente por la acción del hombre.
La caza indiscriminada y el cautiverio ilegal de estos reptiles han puesto en riesgo su reproducción y futura proliferación.
Por otro lado mucho entornos salvajes se han visto vulnerados, en la mayoría de los casos por la mano del hombre, haciéndolos no aptos para que estas tortugas puedan desarrollarse y reproducirse normalmente.