Es una de las especies de medusas más llamativas y que producen a los seres humanos mucha curiosidad, ya que se trata de una medusa que alcanza la vida eterna. Científicamente denominada como “Turritopsis nutricula”, contiene un ciclo de vida que se revierte constantemente justo después de llegar al proceso de maduración sexual.
Muchos suelen comparar esta medusa con el Ave Fénix, ya que vive un proceso de renacimiento, lo cual se considera curioso y nada común.
Características, hábitat, alimentos
Posee un diámetro de 4 a 5 milímetros, tiene una forma acampanada y alargada. Además cuenta con un estómago grande. Es de color rojo fuerte y tiene forma de cruz en el corte trasversal. Las medusas jóvenes disponen de solamente 8 tentáculos, más las adultas disponen de 80 de ellas.
Estas se pueden encontrar en el Océano, son capaces morar en cualquier zona, pero preferiblemente en las templadas y tropicales porque cuentan con una temperatura mayor. Su hábitat natural es el Mar Caribe, pero se ha logrado determinar que se han encontrado muchas de ellas en diversos océanos, debido a los barcos de pesca de arrastre, ya que se encargan de revolver el mar y causan que los animales se desplieguen de su hábitat.
Se alimentan principalmente de plancton, crustáceos, peces de tamaños muy pequeños y de vez en cuando de otras especies de medusas más pequeñas. Estas no buscan a sus presas, sino que se alimentan de lo que llegue a ellas.
Forma de respirar
Muchos se preguntan cuál es el proceso para lograr la respiración en estos animales, ya que no poseen un órgano específico para hacerlo, sólo se puede apreciar su cavidad gastrovascular, que es donde realizan su digestión, pero no se observan branquias, pulmones, ni algo parecido. Más, también gozan de la respiración a través del proceso de difusión.
Está realizado por protozoos y organismos de un tamaño muy pequeño que en ocasiones no se pueden observar a simple vista ya que son microscópicos. También la lleva a cabo la esponja de mar y también otros individuos. La medusa, a pesar de que algunas puedan poseer metros de ancho y pesar muchos kilos, no cuenta con un sistema respiratorio, por lo que realiza el intercambio de gases a través de sus propias células.
Este método se lleva a cabo sin que la medusa tenga la necesidad de tener ningún órgano principal, haciéndolo de forma automática y en todo momento.
Como por norma general, en el exterior siempre va a ver mayor cantidad de oxigeno que dentro del animal, así la difusión será exitosa. Sin embargo, cuando en el mar se encuentran muchas medusas juntas y el nivel de oxigeno es bajo, sube el de dióxido de carbono y estas suelen irse hacia zonas más oxigenadas.
Reproducción y amenazas de las medusas
En cuanto a la reproducción, esta medusa sigue el mismo camino que el resto de sus congéneres, es decir, se reproduce a través de fecundación externa que da lugar a una larva plánula que se aloja en el fondo y de la que propagan innumerables colonias de pólipos que, consecuentemente, se convertirán en cientos de medusas adultas.
Se cree que este tipo de medusa solo haría esto si es encarada por circunstancias de amenaza de vida o corriendo probabilidades de ser devorada o herida físicamente, esta pequeña medusa podría transformar completamente sus células en un estado más joven y renovado, de esta manera, envolviéndose a sí misma en una pequeña masa como pólipo la cual juntándolas a otras se convierten en una colonia de pólipos. Produciendo así una colonia de medusas casi idénticas.