De las tantas especies de primates existentes, el bonobo una de las menos conocida, lo cual es un error considerando que está entre las más fascinantes ¿Qué tiene de especial? acompáñenos a descubrirlo en esta entrega especialmente dedicada a ella.
Cuando se habla de primates, es común que salgan a relucir el chimpancé, el gorila o el orangután, fama con la que no cuenta el bonobo. Tal vez sea por el parecido que guarda con los chimpancés o la poca repercusión de su comportamiento frente a la comunidad científica.
El bonobo es una de las dos especies de chimpancé que existen. También es conocido como chimpancé pigmeo y se caracteriza por lograr la postura erguida en algunas ocasiones así como por presentar determinados comportamientos en la sociedad que lo diferencian del chimpancé común.
Características
La apariencia del bonobo es muy similar a la del chimpancé, diferenciándose por ser un de menor tamaño y morfológicamente más delgados. Pesan alrededor de 40 kilos y se caracterizan por una frente ancha y piernas alargadas que llegan al metro de longitud. Otra de sus particularidades son sus rosados labios que sobresalen en el negro de su cara.
Su altura corresponde a la de dos tercios de un hombre promedio, con el que guarda fuerte vínculo al contar con un ADN idéntico al del sapiens en un 98%; asimismo, se acentúa el parecido al verles caminar erguidos el 25% del tiempo. Pero eso no es todo, los pechos de las hembras son bastante prominentes y al igual que los humanos, cada uno goza de rasgos faciales individuales que les permiten identificarles en su sociedad.
Otros aspectos que acotar, son su gran habilidad para moverse entre los árboles donde se les ven balanceándose entre sus ramas, y de la misma manera que el chimpancé común, son muy malos nadadores.
Hábitat
Las selvas de la República Democrática del Congo en África central, albergan cerca de 10.000 bonobos, especie que ha sido víctima de una considerable reducción de su población debido a la pérdida de su hábitat, que junto a la caza desmedida e influencia del tráfico ilegal para el consumo de carne por miembros de la alta sociedad hace que hoy esté en peligro de extinción.
Alimentos
La dieta del bonobo se sustenta principalmente a base de frutas; sin embargo, se les ve de igual manera alimentarse de hojas, flores, raíces, tallos, setas (tipo de hongo), larvas, gusanos y termitas. Aunque no suelen inclinarse por el consumo de la carne, algunos incluyen en su menú animales pequeños, por ejemplo, ardillas voladoras.
Reproducción
La madurez sexual de la especie llega entre los 13 y 15 años de edad para ambos sexos; se habla de primates cuyas relaciones sexuales ocupan un rol indispensable en su estilo de vida al llevar a cabo diferentes actividades bastante parecidas a las de los ser humanos.
Se necesita un periodo de gestación promedio de 240 días posteriores al apareamiento para que las hembras alumbren a sus crías, lo que vuelve a repetirse después de cinco años, pues son las madres las que tiene la tarea de alimentar y cuidar a sus pequeños.
Amenazas para el bonobo
En estado salvaje dentro de su hábitat natural, la longevidad de estos primates puede extenderse hasta los 50 años de edad. Es en ese entorno que serpientes pitones y leopardos representan sus mayores depredadores; no obstante, es el hombre el peligro más inminente que amenaza su supervivencia, principalmente por su carne.
Es producto de la caza furtiva y descontrolada que apenas quedan cerca de 10 mil bonobos en áfrica central – emplace del que son nativos – a los que se les suman los ejemplares distribuidos en parques nacionales a nivel mundial que persiguen preservar la especie.